Por más razonables que sean sus reclamos, estos deben de realizarse en el más absoluto respeto a la ley y subordinación de la fuerza a las autoridades democráticamente elegidas.
Los manifestantes deben de cesar inmediatamente en esa actitud que atenta contra los poderes públicos y reencauzar los reclamos por los canales institucionales correspondientes.
A los levantamientos armados contra autoridades democráticas decimos siempre: ¡nunca más!
Compartimos la declaración de AABA aquí.